Si el 2011 fue el año de la eclosión de los medios sociales, y de los movimientos sociales surgidos desde las redes (primavera árabe, 15M, #nolesvotes, etc.), el 2012 podría ser el año clave para un cambio de era. Acuciados por una grave crisis económica, que se vislumbra continuará hasta final de año, podemos decir que esta es tan solo la punta del iceberg de una crisis sistémica. Acertadamente, se dice que no estamos en una época de cambios sino en un cambio de época. Una aseveración que coincide con la presunta profecía maya relativa a un cambio de ciclo, que no al fin del mundo, o en todo caso, al fin de «este mundo».
Y en esta nueva época, quienes estamos en la vanguardia del cambio, tenemos la responsabilidad de tirar del carro, de ayudar a los demás a encontrar su sitio en este mundo interconectado, de no «venderles humo», de demostrarles que entre todos, con nuevas herramientas y con una actitud abierta y colaborativa, PODEMOS.
PODEMOS cambiar la forma de hacer política y devolver el poder al pueblo, aunque lo sigan ejerciendo los políticos, que están a nuestro servicio.
PODEMOS salir de la crisis, trabajando más y mejor, y colaborando desde cada uno de nosotros, sin esperar que vengan los políticos a «salvarnos» o a subvencionarnos.
PODEMOS cambiar la actitud, ser proactivos, colaborativos, activos, sociales, constructivos, humanos.
PODEMOS hacer lo que nos propongamos, trabajando en red, buscando el beneficio mutuo, y entre todos generar riqueza, en lugar de redistribuirla.
El mundo ha cambiado, y nosotros PODEMOS Y DEBEMOS hacerlo también. No se trata tan solo de sumarse a la ola, sino de surfearla.
Si hace un par de años alguien me hubiera dicho que, mientras veo el Concierto de Año Nuevo de Viena, estaría escribiendo un post en mi blog, desde una aplicación en mi teléfono móvil, desde una remota aldea berciana, conectado al mundo gracias al 3G, me habría costado creerlo … o no! Y que alguien me lea, tal día como hoy… un milagro! Así que, si has llegado hasta aquí, te agradeceré tus comentarios, o RT’s, «me gusta», etc.
Feliz Año 2.0_12, y que sea realmente provechoso y 2.0 para todos.